Sargazo transformado en libretas
Las grandes ideas pueden surgir en momentos inesperados
Después de que Victoria Morfín fue noticia nacional el año pasado, gracias a la innovadora idea de utilizar sargazo en la fabricación de libretas, la joven de 19 años se asoció con Grupo Regio, una imprenta con base en Cancún con más de 28 años de experiencia, para crear Sargánico.
De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, el sargazo es una macroalga marina color marrón que se ha convertido un problema debido a que recala en gran cantidad en las costas del Caribe.
Estuvimos con la CEO para abundar sobre su propuesta, los retos a los que se ha enfrentado al ser una emprendedora joven y las proyecciones a futuro de Sargánico.
Jóvenes y el cambio climático
En la Convención de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica, la ONU dio a conocer que la humanidad tiene sólo 10 años para combatir el cambio climático antes de que los estragos causados en el ambiente sean irreversibles.
Por el momento, parecen ser las generaciones más jóvenes las que mejor han entendido la urgencia de fomentar una cultura del cuidado del ambiente. “Las generaciones anteriores veían muy lejos los estragos del cambio climático, pero a partir del 2010 se ha notado el gran impacto en nuestro ambiente; crecimos viendo derrames de petróleo, incendios, animales en peligro de extinción, contaminación, basura en la calles. Estamos viendo los estragos y estamos actuando”, explica Victoria Morfín.
Dato:
Trendsity, consultora de tendencias para empresas, cataloga a la generación nacida entre 1981 y 1995 como los “nativos sustentables”; en América Latina, el 80% de éstos se siente motivado a generar cambios de hábitos y 76% cree que heredó el problema porque cada generación le pasa la responsabilidad a la siguiente en temas de cuidado ambiental.
Empresa verde y socialmente responsable
Sargánico nació del interés y preocupación de Victoria y su madre, Adriana Morfín, quienes buscaban reducir desechos y dar una posible solución al gran problema del sargazo en las playas del Caribe Mexicano. Para ellas fue importante seguir siendo una empresa que manufactura sus productos de manera artesanal y no en volumen, por lo que cada libreta, carpeta y portavaso, por nombrar algunos, es fabricado a mano y sigue el mismo proceso con el que comenzaron, algo que quiere conservar en el futuro.
“En cinco años veo a Sargánico teniendo su propia planta de producción, produciendo una tonelada de papel de sargazo y reciclando cinco toneladas de papel al día”, dice la joven empresaria, quien en su afán de ver concretado su proyecto, cambió su lugar de residencia, de la isla de Cozumel a Cancún.
Sargánico además de cubrir una necesidad ambiental, también tiene fines sociales, como fuente de empleo a estudiantes, personas de la tercera edad, discapacitados y madres solteras, a quienes, de igual manera, se les diseña un plan de carrera dentro de la empresa para que puedan crecer laboralmente.
Victoria señala que siguen experimentando con diferentes materiales para desarrollar nuevos productos, seguir innovando y posicionarse en el extranjero, conforme a los objetivos de la empresa.
No quiero quedarme en México (con Sargánico), quiero exportar el producto para que los extranjeros vean que en Quintana Roo hay jóvenes que ‘la están rompiendo’, haciendo cosas interesantes y, por supuesto, ser una fuente de ingresos para más personas, sobre todo para aquellas a las que se les ha negado la oportunidad de trabajar, como estudiantes, personas de la tercera edad, con capacidades diferentes o madres solteras, porque no queremos que se quede en un proyecto ambiental, sino que contribuya al mejoramiento de la sociedad”, agrega.
Los retos de emprender joven y ser mujer
México ocupa el segundo lugar como el país con más actitud emprendedora, según cifras del “Reporte Global de Emprendedores Amway 2015”, sin embargo, la situación no es favorable para los millennials, pues la edad promedio de los emprendedores exitosos es de 42 años, eso sin contar que hay una tendencia a prejuzgarlos.
Los retos que he tenido a lo largo de este tiempo se han dado tanto por mi edad como por ser mujer. Si te das cuenta, hay más emprendedores hombres de mi edad que mujeres… cuando inicié y todavía no me había asociado con Grupo Regio y sólo éramos mi mamá y yo, nos topamos con muchos empresarios e inversionistas que se querían aprovechar. El que más recuerdo es uno que se puso “muy intenso”, me dijo que que yo no podía ser una buena empresaria porque las mujeres son muy sentimentales… Ahora, afortunadamente, Francisco, mi socio me ayuda con las empresas más grandes, pero tuve que prepararme más, aprender a hablar mejor y mejorar mi imagen, porque en las juntas con grandes empresarios no me tomaban en serio por el color de mi cabello y todos los prejuicios presentes en el ámbito empresarial”, manifiesta la CEO de Sargánico.
Los emprendedores representaban el 4.8% de la fuerza de trabajo, el 79% son hombres y sólo el 21% mujeres. INEGI, 2014.
Por último, al preguntarle qué recomienda a los demás emprendedores a la hora de buscar inversionistas para su proyecto, responde que lo principal es que no se “enganchen” con las críticas negativas y que, en lugar de eso, sepan analizar lo que éstas quieren decir, pues ahí está el verdadero campo de oportunidad para mejorar y pulir el proyecto. De igual manera, recalca la importancia de seguir preparándose y de estar seguros de su idea
