La transición hacia una economía baja en carbono se ha convertido en un objetivo crucial para las empresas mexicanas. Sin embargo, este camino hacia la descarbonización presenta desafíos significativos que requieren atención y acción estratégica.
La Importancia de Medir la Huella de Carbono
Jorge López Azuara, director de Calidad y Sustentabilidad en Grupak, destaca que el primer paso hacia la sostenibilidad es medir la huella de carbono de las operaciones empresariales. Esta medición permite identificar las principales fuentes de emisiones y establecer estrategias efectivas para su reducción.
Desafíos en el Acceso a Energías Limpias
Uno de los principales obstáculos que enfrentan las empresas en México es el acceso limitado a fuentes de energía limpia. A pesar de los esfuerzos por adoptar sistemas de cogeneración eficiente, muchas compañías aún dependen de plantas de carbón debido a restricciones legislativas y normativas que dificultan la transición hacia energías renovables.
Iniciativas para Transformar el Consumo Energético
A pesar de estos desafíos, algunas empresas están tomando la iniciativa para transformar su consumo energético. Programas como el impulsado por Quartux y Bono2 buscan habilitar soluciones tecnológicas de alto impacto para optimizar el consumo energético y reducir las emisiones de CO₂ en industrias mexicanas de alto impacto.
El Rol de la Innovación y la Tecnología
La innovación tecnológica juega un papel fundamental en la descarbonización empresarial. Empresas como Holcim México han desarrollado productos con menor huella de carbono, como cementos que reducen hasta un 35% las emisiones durante su fabricación. Además, están explorando tecnologías de captura de carbono para contrarrestar las emisiones generadas por la producción de materiales.
La descarbonización empresarial en México es un proceso complejo que requiere la colaboración de diversos actores, incluyendo el gobierno, el sector privado y la sociedad civil. Si bien existen desafíos significativos, también hay oportunidades para innovar y liderar en la transición hacia una economía más sostenible. Es fundamental que las empresas adopten estrategias proactivas para reducir su huella de carbono y contribuyan al bienestar ambiental y económico del país.
