El cambio climático, la degradación ambiental y la escasez de recursos presentan desafíos significativos en el mundo actual. Problemas como la deforestación, la contaminación del aire y el agua, la pérdida de hábitats naturales y la disminución de la biodiversidad afectan la calidad de vida y tienen un profundo impacto en los ecosistemas, la seguridad alimentaria y la estabilidad económica. Para enfrentar estos retos, es esencial adoptar prácticas de desarrollo sostenible y promover el uso responsable de los recursos naturales, involucrando a todos los actores, especialmente a las mujeres.
La Importancia del Rol de las Mujeres en la Sostenibilidad
Las mujeres juegan un papel fundamental en el desarrollo humano sostenible debido a su fortaleza, inteligencia y capacidad para gestionar recursos. Culturalmente, se les ha asignado un rol de cuidado que se relaciona estrechamente con el manejo del agua, los alimentos y la energía en los hogares. Esta relación diaria con los recursos naturales y los ecosistemas les otorga una influencia significativa en la promoción del equilibrio entre el progreso económico, social y ambiental, fomentando la resiliencia y preservación del medio ambiente para futuras generaciones.
Barreras y Desigualdades
A pesar de su papel crucial, las mujeres enfrentan restricciones debido a patrones culturales y roles de género desiguales y arraigados. La lucha por obtener espacios en la toma de decisiones sobre el uso de recursos como agua, tierra y bosques es constante y, en ocasiones, frustrante.
Incorporar la Perspectiva de Género en la Gobernanza de Recursos Naturales
Para una gobernanza efectiva de los recursos naturales, es crucial incorporar la perspectiva de género en la planificación y supervisión de medidas, así como invertir en el liderazgo de las mujeres y en el respaldo de sus redes de apoyo.
Recomendaciones de la Estrategia de Montevideo
La Estrategia de Montevideo para la Implementación de la Agenda Regional de Género en el marco del Desarrollo Sostenible hacia 2030 ofrece varias recomendaciones clave:
- Empoderamiento Económico: Promover el acceso de las mujeres a recursos económicos, incluyendo financiamiento y medios de producción, para su participación en proyectos sostenibles.
- Educación y Formación: Garantizar la igualdad de oportunidades en educación y capacitación, fomentando la participación de las mujeres en áreas relacionadas con la sostenibilidad y STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas).
- Participación Política y Toma de Decisiones: Incrementar la presencia y participación de las mujeres en espacios de toma de decisiones relacionados con la sostenibilidad mediante medidas afirmativas y políticas de igualdad de género.
- Salud y Bienestar: Asegurar el acceso a servicios de salud sexual y reproductiva de calidad para el empoderamiento de las mujeres y su participación en proyectos de desarrollo sostenible.
- Prevención y Erradicación de la Violencia de Género: Prevenir y eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas, incluyendo la violencia ambiental y la explotación de los recursos naturales.
Establecer un Pacto Global para el Futuro
Es fundamental establecer un pacto global que considere las necesidades de las generaciones futuras y los problemas específicos que afectan a las mujeres. Mejorar la inserción laboral de las mujeres y generar políticas públicas de cuidado que les brinden mayor autonomía económica es esencial. Incluir a las mujeres como figuras clave en los procesos de desarrollo, consultas, diseño e implementación de políticas y programas es crucial para desbloquear su potencial y fortalecer su capacidad para contribuir significativamente al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y a la construcción de un futuro sostenible.
