La perspectiva global sobre el impacto de la inteligencia artificial (IA) varía significativamente entre los países de la OCDE, revelando una clara división entre las naciones nórdicas y asiáticas, que expresan una mayor confianza en el desarrollo positivo de esta tecnología emergente. Por otro lado, países latinoamericanos como Colombia, Costa Rica y, sobre todo, Chile, mantienen una percepción más cautelosa y negativa.
En un estudio exhaustivo sobre las competencias necesarias para enfrentar desafíos futuros como el cambio climático y las nuevas tecnologías, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) destaca que la percepción hacia la IA está influenciada por diversos factores, como el género, la discriminación social (étnica o religiosa) y el nivel educativo.
En países como Islandia, Japón, Corea del Sur, Finlandia, Suecia, Noruega, Dinamarca y Alemania, al menos la mitad de la población adulta encuestada en 2021 expresó su creencia en que la IA tendrá un impacto positivo en los próximos 20 años. En estos lugares, el porcentaje de aquellos que ven con escepticismo los efectos de esta tecnología era relativamente bajo, oscilando entre el 14% en Islandia y el 31% en Alemania.
Contrastando con esta tendencia, hasta un 52% de adultos en Portugal, un 50% en Chile y Luxemburgo, un 49% en Turquía, un 47% en Grecia y Croacia, un 46% en Bélgica y Costa Rica, un 44% en Francia y un 43% en Colombia, percibieron el impacto de la IA con desconfianza.
España ocupó una posición intermedia, con un 47% de la población mostrando una perspectiva positiva y un 40% con una visión negativa.
A nivel global dentro de la OCDE, el 35% anticipa consecuencias más bien desfavorables, mientras que el 42% cree que la IA beneficiará a la sociedad. Los resultados del estudio destacan que la preocupación a largo plazo por esta tecnología es mayor entre las mujeres (38%) que entre los hombres (32%) y más pronunciada entre personas sin educación universitaria (37%) que entre aquellos con educación universitaria (28%).
El estudio también revela que, aunque la demanda de competencias en IA es aún baja en términos relativos, ha experimentado un rápido crecimiento en los últimos años. En una muestra de 15 países de la OCDE con cifras comparables, el porcentaje de puestos de trabajo en anuncios en línea que requerían competencias en IA aumentó del 0.30% en 2019 al 0.40% en 2022, antes del lanzamiento del modelo de IA generativa de ChatGPT.
España, que inicialmente ocupaba una posición rezagada en 2019 con solo un 0.1775% del total, superó la media en 2022 con el 0.5425%, aunque aún se encuentra significativamente por debajo de Estados Unidos, que lidera la lista con un 0.8381%.
En términos de sectores, las tecnologías de la información y la comunicación, las «actividades profesionales» y las manufacturas concentran la demanda de profesionales con habilidades en IA.