La emergencia sanitaria modificó hábitos, conductas, formas de trabajo, pero también dio lugar al surgimiento de micronegocios que hoy mantienen un espacio en el mercado, como la “economía neni”, refierida a las mujeres emprendedoras que usan redes sociales y marketplaces digitales para comprar y vender todo tipo de productos. La UNAM presentó en 2020 el estudio “Economía neni dinamiza el comercio digital en México”, cuando ya generaba ventas diarias por unos 9.5 millones de pesos para el sustento de unos 13 millones de hogares.
En realidad, esa práctica es común en México y ha sido un pilar de la economía familiar durante décadas, desde la venta por catálogo de ropa, zapatos o utensilios para el hogar, hasta las “tandas” o cajas de ahorro. Esa actividad, ampliada, se trasladó a internet con la pandemia. Hoy la mujer puede hacer uso de la formalización, la adopción tecnológica y profesionalización para mantener sus operaciones y crecer durante la recuperación económica, explica Marilú Páez, General Manager de QuickBooks México, plataforma de administración y facturación en la nube que ayuda a las pymes a automatizar sus finanzas.
A continuación te compartimos tres claves sobre como las mipymes lideradas por mujeres pueden impulsar al ecosistema emprendedor en su conjunto y posicionar a la economía “neni” como uno de los músculos empresariales más importantes del país:
1.-La formalidad, oportunidad para crecer.
Las emprendedoras representan 26 por ciento de las mujeres ocupadas en el país. No obstante, el 82% opera en la informalidad, es decir, poco más de 4 millones trabajan sin reconocimiento de la ley. Esto se traduce en menores niveles de productividad, salarios más bajos y falta de acceso a herramientas que permitan el crecimiento o acceso a nuevos mercados.
2.-Tecnologizar la administración.
Un paso clave para profesionalizar la economía “neni” es la adopción tecnológica de sus negocios, con el uso de herramientas que les ayuden a gestionar, controlar y visibilizar las finanzas de sus emprendimientos. Eso es importante porque entre los factores que ocasionan más cierre de esos negocios están la mala administración y poca disponibilidad de tiempo.
3.-Capacitación continua.
Es una estrategia que abona a su evolución, dado que ”los emprendimientos femeninos en México tienden a fracasar por los conocimientos limitados en torno al manejo de sus negocios y la brecha digital”.
Este sector económico enfrenta barreras, pero aún tiene un gran camino por recorrer para seguir sumando a la economía del país, de sus familias y colaboradores.