El reciente enfoque público sobre plataformas como Shein y Temu por supuesta evasión fiscal ha puesto en la mira a otras compañías extranjeras de comercio electrónico que operan en México. Sin embargo, estas dos no son las únicas. Walmart, AliExpress y una larga lista de marketplaces internacionales también están bajo el radar del Servicio de Administración Tributaria (SAT), lo que amplía el debate sobre equidad fiscal y regulación digital.
De acuerdo con la jefa del SAT, Rosalinda López, el marco de fiscalización aplica por igual a todas las plataformas extranjeras que venden productos en el país, independientemente de su nacionalidad. Esto incluye desde empresas chinas hasta gigantes estadounidenses que realizan ventas en línea y utilizan esquemas logísticos para introducir mercancía sin los impuestos tradicionales.
Uno de los principales retos es que muchos consumidores mexicanos compran directamente en estos portales, aprovechando precios bajos derivados de la omisión de aranceles o el uso de figuras legales como “paquetería personal”, lo cual complica el rastreo fiscal. No obstante, el SAT ha comenzado a colaborar con autoridades aduaneras y plataformas de pago para detectar operaciones que incumplen la normatividad vigente.
El caso de Shein y Temu ha sido particularmente mediático por su crecimiento explosivo y su popularidad entre los consumidores jóvenes, pero no es un fenómeno aislado. Walmart, por ejemplo, opera con un modelo híbrido donde algunos productos provienen directamente de proveedores internacionales que no siempre tributan en el país. AliExpress, por su parte, sigue siendo un actor importante en la entrada de pequeños paquetes desde Asia a través de esquemas postales que están siendo revisados.
La estrategia de fiscalización no busca desincentivar el comercio digital, sino garantizar que todos los actores cumplan con las mismas reglas. De esta manera, se protege tanto al consumidor como a los comerciantes locales, quienes enfrentan una competencia desigual si los grandes marketplaces evitan sus responsabilidades fiscales.
El panorama apunta hacia una regulación más estricta que permita al fisco mexicano cerrar las brechas legales y tecnológicas que hoy permiten que muchas ventas extranjeras escapen del pago de IVA y otros impuestos. Se espera que en los próximos meses se anuncien nuevas medidas que exijan a las plataformas actuar como retenedoras fiscales o registrar oficialmente sus operaciones en el país.