Santiago Canto era maestro de música en la escuela primaria de un poblado del estado de Campeche, Bécal. Fiel a su vocación llevaba a su nieto Russel, de seis años, a las fiestas para cantar.
Han pasado algunos años y Russel Navarrete Canto continúa cantando, sólo que ahora lo hace ante grupos de entre 100 a 4 mil personas con su agrupación musical Collage.
Comenzó con Juan Carlos y su banda, donde permaneció durante tres años hasta que se dio cuenta de que el negocio está en ser dueño de la agrupación. “El músico está mal pagado, el baterista, el saxofonista, tienen que combinar con otra cosa, a los dueños del grupo les va mejor”.
Russel pasó por el seminario de Campeche, pero un semestre bastó para darse cuenta de que no era lo suyo. Conoció a Elsy Vázquez Manzanilla cuando estaban con Juan Carlos y su banda, se enamoraron y decidieron iniciar una vida juntos, así comenzó también su propio grupo musical: Collage.
Para Navarrete Canto, el éxito tiene que ver con la calidad del grupo pero aún más con las relaciones que se hacen. Collage tiene 24 años en el mercado de la música, y se encuentra entre los 5 mejores de Mérida.
“No es sólo la música, es cómo te presentas, la infraestructura que tienes, se tiene que invertir mucho dinero en el audio, las luces, hay que estar al pendiente del repertorio, tocar lo que le gusta a la gente, estar actualizado y la animación”.
La fama los ha llevado a amenizar fiestas en Villahermosa, Veracruz, Campeche, Quintana Roo y Yucatán, sin embargo prefieren no alejarse tanto debido al riesgo que representan algunas carreteras, donde hay asaltos de forma frecuente.
“Tengo unas pantallas Led en las que invertí 600 mil pesos, las bocinas son 16 mil pesos cada una, las de graves y medios son aún más caras, más los cabezones que utilizamos en animación que están entre 10 mil y 8 mil pesos, más las luces robóticas, las barras de Led, más el mantenimiento que requiere el equipo, es una inversión fuerte”.
Un collage en la pandemia
Se quedaron sin eventos y entonces, el vocalista y líder de la agrupación se dedicó a otra cosa que conoce muy bien: la venta de tecnología, para mantenerse mientras pueden regresar a los escenarios.
Desde el punto de vista de Russel Navarrete este diciembre no será ni remotamente parecido a su peor año, sin embargo considera que habrá fiestas pequeñas por lo que armará una versión “petit” para posadas de 50 personas.
El negocio de las fiestas
El grupo Collage cobra alrededor de $45 mil pesos por un evento en sábado antes de la pandemia.
Cuenta con 18 empleados, 10 de ellos se encuentran en el escenario, uno es animador y siete son parte del staff.
Un músico que toca en alguna agrupación gana entre mil y mil 500 pesos por cinco horas de trabajo.
La inversión hecha en equipo de sonido, iluminación y animación es de alrededor de 2.5 millones de pesos.
El poder de la cumbia
El grupo Los Méndez surgió hace más de dos décadas, en Motul, Yucatán, fundado por los hermanos Méndez, aunque después de u tiempo Reyes Herrera compró los derechos. Hoy es uno de los más exitosos de Yucatán, con canciones como El baile del pavo y La quita maridos.
Para que el negocio funcione “hay que delegar responsabilidades para disfrutar de tu trabajo, yo no me meto en lo que no sé; no sé música, para eso tengo un director musical; sé administrar, pero mi socia es la administradora principal y yo manejo las relaciones públicas y dentro del grupo mi fuerte es la animación”.
El grupo tiene 18 discos, son producciones caseras que se graban en marzo, abril y mayo, eligen los temas, graban en septiembre y presentan el disco ante 5 mil personas en la Plaza Grande, en el centro de Mérida. Del material discográfico llegan a vender hasta 15 mil unidades, porque se promueven a través de la radio, la televisión y el internet.
“Muchas veces intentamos lanzarnos a nivel nacional, viajamos a la Ciudad de México donde ni caso te hacen”, por lo que se dedican a las ferias y gremios de los pueblos, informes de gobierno y cierres de campaña. Los eventos sociales, como bodas o XV años no son lo suyo.
El pilón de la pandemia
El grupo Los Méndez lo integran 12 músicos, pero en total Pilón dirige a 28 personas, con técnicos y staff. La pandemia los obligó a reprogramaron alrededor de 20 eventos, a los integrantes de la organización se les paga con los anticipos de los eventos y con despensas. Reyes vislumbra un panorama difícil hasta abril o mayo del 2021, hasta que haya vacunas.
La cumbia en pesos mexicanos
Mover al grupo para un concierto cuesta alrededor de 20 a 22 mil pesos, entre ensayos, comidas y pago a 28 empleados, incluyendo los músicos.
Un músico gana de 800 a mil 500 pesos por concierto, así que no puede cobrar menos de lo que cobra por un evento masivo ni dar precios de “buen fin” sin pérdidas económicas.
“Ahora todos tenemos que trabajar una semana para ganar lo de un solo concierto”, él está en el negocio de los lácteos en lo que se dan las condiciones adecuadas para volver a los escenarios.
“Los músicos tenemos que luchar mucho porque no siempre hay contratos, en nuestro caso somos de los tres grupos privilegiados en Yucatán, de los que tienen más contratos, tenemos de 8 a 10 eventos al mes, la ganancia no es mala”.